SINOPSIS:
La vida prevalece sobre la muerte, y la muerte consume una vida.
Todo ha cambiado. La ciudad asume el giro inesperado de los acontecimientos con Angelo ostentando más poder que nunca gracias a Enrico y todo marcha según lo previsto.
Los Carusso empiezan a dominar Roma.
Los Gabbana se fragmentan.
Sarah se ahoga en el amor y el odio.
Y Kathia se pregunta por qué pertenece a un todo y ya no es nada. Una situación que desbordará incluso a aquellos que creían tenerla controlada.
OPINIÓN PERSONAL:
Creo que de los tres primeros libros es el que más he tardado en leer y eso que es el más corto. El primero fue el que me enganchó a esta historia de amor entre la mafia; el segundo fue mi favorito porque la autora solucionaba una cosa pero aparecían mil sin solucionar dándole la vuelta a la historia. Y luego, el final que literalmente me mató. No comprendía nada porque, ¿quién iba a esperar semejante traición? Y nunca mejor dicho, porque la segunda entrega se titula justo así. Y el tercer libro, que lo esperaba con ganas de revancha por parte de los Gabbana y de Kathia, es justo lo contrario. La naturaleza de Colapso es totalmente depresiva, no hay venganza sino brechas que se vuelven a abrir y mucha tristeza, dolor, desolación por la pérdida de tu alma gemela, de un amigo, de un primo, de un hijo.
En esta entrega vemos a una Kathia autodestructiva, fría, débil, sin ganas de vivir, que cuenta los días para que la pesadilla acabe y poder reunirse con su gran amor. Y es que su vida ya no es lo que era. Esa chica dulce que llegó a Roma por petición de su padre ahora está entre la espada y la pared. La mafia gobierna su mundo. Por un lado, están los Carusso, su propia familia a la que no se siente muy unida. Por otro lado, los Gabbana, la familia del hombre que ama y que cada vez tiene menos poder en Roma. Ambos la quieren, pero con diferentes intenciones, algo que vimos en las entregas anteriores.
La cuestión es que Kathia no sabe en quien confiar. Quien creía que estaba de su lado la traicionó de la manera más cruel y alguien a la que detestaba en el pasado se vuelve su mejor aliada, su hombro en el que llorar, su sombra.
«Cristianno, mi amor. Llévame contigo… Llévame contigo.»
En Colapso como en Traición contamos con tres puntos de vista diferentes. Tenemos a Kathia, cuyo comportamiento y pensamientos no me han gustado mucho, aunque es comprensible después de perder a tu gran amor. Esperaba de ella más sed de venganza y que se fiara un poco de su intuición, pero en fin… Luego tenemos a Sarah, que toma cada vez más importancia y la veremos en un triángulo amoroso, pero no por parte de ella, que sigue amando a Enrico, sino por parte de un tercero.
«Puede que estés a un par de calles de aquí, pero te echo mucho de menos. Esa es una de las cosas que me roba el sueño.»
Junto a ellas encontramos a Mauro Gabbana. Sí, sí, el primo de Cristianno se vuelve narrador y tengo decir que me ha encantado ver como piensa, como actúa y como siente. Gracias Alessandra por crear esta historia de amor prohibido que me ha enamorado desde el principio. Tenía ganas de verle como su primo después de haberse reído de éste, enamorado hasta las trancas, y es que tengo que decir que es lo que me ha hecho seguir para adelante con el libro, porque si no hubiera habido nada clandestino hubiera sido un poco insufrible para mí (los libros tan depresivos no me van). ¿Y sabéis quién es la afortunada que ha robado el corazón de Mauro?... Si la queréis conocer leeros el libro, no tiene ningún desperdicio.
Tengo que decir que Colapso, en general, está bien, pero desde mi punto de vista la escritora bajó un poco el listón. Es decir, no ha sido como los dos anteriores que me engancharon desde el principio, pues éste tiene un ritmo más lento que no va mucho conmigo. Es más, lo que realmente me ha mantenido leyendo el libro, y lo he dicho anteriormente, ha sido la nueva historia de amor de Mauro Gabbanna y su chica X.
«– Ten cuidado… por favor –susurró al volver a mirarme.– ¿Te importa que lo tenga? –gemí.– Empieza a importarme.»
También quiero resaltar que he echado mucho de menos a Cristianno. Ya sé que está su primo, pero Cristianno es Cristianno y su historia de amor con Kathia es la que me tiene enamorada.
Ah, otra cosa que se me olvidaba y es muy importante. Alessandra vuelve a dejarnos con un final, que madre mía, me dejó con la boca abierta. El desenlace de la entrega vuelve a no defraudarme dejándome enganchada y con ganas de más en la siguiente entrega.
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