"Los Jóvenes de la Élite" de Marie Lu

SINOPSIS:

La fiebre de la sangre asoló Kenettra –una isla-ciudad similar a la Venecia renacentista– hace diez años. Algunos de los supervivientes desarrollaron habilidades sobrehumanas debido a las cuales el pueblo les teme y les idolatra a partes iguales. Les llaman los Jóvenes de la Élite. Adelina sobrevivió a la fiebre de la sangre. Y sus habilidades han despertado el interés de los tres bandos que se disputan el poder en la ciudad: el Eje de la Inquisición, la Sociedad de las Dagas… y su propia familia.

OPINIÓN PERSONAL:

Para empezar, tengo que deciros que no tengo muy clara la opinión sobre Los Jóvenes de la Élite. Me ha parecido un libro singular, extraño (en el buen sentido de la palabra) porque mientras lo estaba leyendo no sabía muy bien por dónde cogerlo. Y es que es una lectura diferente.

«Pensamientos oscuros nadan en los rincones más profundos de mi mente. Hay algo vivo en esos susurro, luchan por llamar mi atención, me invitan a meterme más profundamente entre las sombras, y me da miedo escucharlos.»

Hace diez años, la fiebre de la sangre, una terrible enfermedad mortal, asoló las tierras de Kenettra. La mayoría de los infectados murieron, sólo sobrevivieron algunos niños a los que les quedaron extrañas marcas: cicatrices, desfiguraciones y la presencia de colores antinaturales en sus pieles, cabellos u ojos, que les hacen destacar entre el resto de la población. Estos niños, a los que denominaron malfettos, son considerados como una maldición, una abominación que trae mala suerte.

Adelina Amouteru, la protagonista, es una de las supervivientes de la llamada fiebre de la sangre. Su pelo negro se volvió plateado, sus pestañas palidecieron y ahora tiene una cicatriz donde una vez estuvo su ojo izquierdo. Tras perder a su madre por la enfermedad, ha tenido que soportar los abusos de su padre, quien cree que es una malfetto y que está arruinando el buen nombre de la familia. Siempre ha estado a la sombra de su hermana menor Violetta, quién logró esquivar la enfermedad. Un día, harta de todo, Adelina decide escapar. Ahí será cuando conoce a los Jóvenes de la Élite, supervivientes de la fiebre que tienen una peculiaridad: poderes sobrenaturales.

Teren Santoro trabaja para el rey. Como líder del Eje de la Inquisición su trabajo es encontrar a los Jóvenes de la Élite y destruirlos antes de que sean ellos quienes destruyan la nación.

Por otro lado, Enzo Valenciano es miembro de la Sociedad de las Dagas. Este grupo secreto de Jóvenes de la Élite busca a otros como ellos antes de que Teren y la Inquisición dé con ellos. Adelina quiere creer que Enzo está de su lado y que Teren es el auténtico enemigo. Sin embargo, la vida de estos tres se cruzará de manera inesperada, ya que cada uno de ellos tiene sus propias batallas personales que librar. Pero todos están de acuerdo en algo: Adelina tiene habilidades que no deberían pertenecer en este mundo. Hay una vengativa fuerza oscura en su interior y una implacable ansia por destruir a cualquiera que se atreva a traicionarla.

¿Ahora me entendéis? La protagonista no es la típica heroína, es más bien una villana. Adelina es un personaje muy oscuro, muy ambicioso, con muchas ansias de poder y con mucho odio dentro. Y es que ha aguantado durante muchos años los desprecios y castigos físicos de su padre, y queráis o no, esto ha marcado su carácter. A pesar de todo ello, he percibido el amor que siente hacia su hermana, lo mucho que la quiere. Por lo que entre tanta oscuridad podemos encontrar una gota de luz.

En cuanto al resto de personajes (Enzo, Teren, Violetta y los Dagas), cada uno de ellos tiene sus secretos, que poco a poco se irán descubriendo. No quiero contaros mucho más sobre ellos porque creo que lo tendríais que averiguar vosotros mismos, pero mientras unos buscan venganza, otros buscan poder, y otros justicia.

«Todo lo que sé es que, mientras el tiempo se eterniza, mi verdadero ser está dando paso despacio pero con paso firme a algo amargo. Lo que una vez fuera tristeza está dando paso a la ira. La oscuridad avanza sigilosamente. Exhausta, le doy la bienvenida.»

La ambientación de Los Jóvenes de la Élite me ha encantado. Tiene un toque de época, cuenta con varias referencias orientales y los escenarios se parecen a una Venecia anclada en el pasado, con sus canales y sus góndolas. Asimismo, aquí no nos encontramos con un instat-love de esos, para nada, el amor tiene muy poca cabida en esta historia.

El libro está narrado desde varios puntos de vista: la mayoría de capítulos desde la perspectiva de Adelina, y el resto desde la de Teren Santorou, Raffaele (un Daga) o Enzo. Además, al inicio de cada capítulo encontramos unos pequeños textos sobre leyendas, cultura y mitos del mundo creado por la autora. Algo que me ha parecido muy original y que me ha gustado mucho. No obstante, tengo que decir que los capítulos de Adelina me han parecido largos y, a veces, se me han hecho pesados.

Por otra parte, tengo que decir que el libro arranca con fuerza aunque esa fuerza se va debilitando en el desarrollo, que es más pausado y carece de la acción que podemos encontrar en el final. El desenlace de la historia es increíble, da muchos giros, te deja con ganas de más y posee mucha acción. Es un final que no te esperas.

«Estoy cansada de perder. Estoy cansada de que me utilicen, me hagan daño y luego me abandonen. Es mi turno de utilizar. Mi turno de hacer daño.»

En definitiva, Los Jóvenes de la Élite es un libro muy original y oscuro, con una ambientación fantástica y unos personajes inquietantes y peculiares a los que estamos muy poco acostumbrados.